A menos de 20 días de la fecha fijada para celebrar el festival Woodstock 50 -el aniversario conmemorativo del famoso festival que se realizó en 1969, en el que diversos grupos musicales se presentaron en favor de la paz-, el evento fue cancelado.
“Nos entristece que una
serie de contratiempos imprevistos hayan hecho imposible organizar el
festival que imaginamos con el gran cartel que habíamos reservado y el
compromiso social que esperábamos”, dijo en un comunicado Michael Lang,
cofundador del concierto original de tres días.
Lang y sus compañeros organizadores habían intentado sin éxito definir
un lugar para realizar el festival. Pensaron en Nueva York, así como
también en Watkins Glen y en Vernon.
El festival estaba planeado para el 16, 17 y 18 de agosto. La
cancelación era esperada después de cinco meses complicados, en los que
los organizadores recibieron la negativa de dos lugares propuestos en
Nueva York, perdieron financiamiento y enfrentaron el retiro de grandes
figuras como el rapero Jay-Z y la estrella pop Miley Cyrus.
Pérdida de artistas
Los organizadores habían comunicado a los agentes de los artistas que
Woodstock 50 no les obligaría a cumplir sus contratos para un evento que
“posiblemente se iba a trasladar 350 millas (563 kilómetros) al sur de
su localización original”, desgranó Billboard.
Así, a lo largo de las últimas semanas y ante la inminencia del
festival, que no había puesto a la venta ninguna entrada, comenzaron a
conocerse las primeras ausencias, como la de John Fogerty, que actuó con
Creedence Clearwater Revival en el histórico evento de 1969.
Fogerty pasará ese fin de semana “en un solo sitio, el original: el
Centro de Artes de Bethel Woods”, indicaron sus agentes a la revista, en
referencia a otro festival que se celebrará también del 16 al 18 de
agosto en esa localidad y que contará con su banda, con Ringo Starr y
con Carlos Santana en escena.
Precisamente el legendario guitarrista Santana es otro de los artistas
que impulsaban el cartel de Woodstock 50 y que se han retirado, al igual
que The Lumineers, The Black Keys, Joe McDonald, John Sebastian, Miley
Cyrus, Jay-Z, entre otros.
Un problema tras otro
La organización del evento conmemorativo, encabezada por el cofundador
del festival original Michael Lang, se enfrentó a numerosos problemas
desde que anunció la celebración del aniversario, pero insistió en que
iba a tener lugar, ya que en 1969 también hubo contratiempos.
Tras anunciar su cartel en marzo, Woodstock 50 no comenzó a vender las
entradas en la fecha que había previsto, en abril, y tras posponerla
trascendió que no había obtenido un permiso del estado de Nueva York.
Días después, su socio financiero, Dentsu Aegis, se retiró y canceló
unilateralmente el festival, pero Lang descartó esa acción y a través de
abogados emprendió acciones legales contra la firma, que finalmente
quedó exenta de devolverle al cofundador unos fondos de la organización
que aseguraba se habían apropiado ilegalmente.
En junio, Woodstock 50 recibió otro mazazo con la retirada de la
productora CID Entertainment, la rescisión de otra licencia y el anuncio
de la localidad de Watkins Glen de que no acogería el evento, tras lo
que en julio hubo cuatro intentos infructuosos de llevarlo a la cercana
ciudad de Vernon.
Después de eso, los organizadores enviaron una declaración a la revista
Pitchfork señalando que iban a “considerar todas las opciones en este
punto” y fue entonces cuando apareció la opción del pabellón
Merriweather en la ciudad de Columbia, en el estado de Maryland.
El presidente de la promotora musical IMP y operador del pabellón, Seth
Hurwitz, dijo entonces al NYT que los organizadores le habían contactado
y estaban “afianzando los artistas”.
“Si las bandas vienen, produciremos el espectáculo”, señaló en esa
ocasión, pese a que el día 17, el central, ya había dos conciertos
independientes del festival anunciados en ese espacio.
Finalmente, luego de que numerosos artistas cancelaran las
presentaciones, el evento fue dado de baja.