La fuente de esta noticia es: EMOL El cuadro “La Virgen de la leche”, del pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo (1618-1682), volvió a la Galería Nacional de Arte Antiguo de Roma, cargado de “descubrimientos históricos y técnicos” tras su restauración, aseguró hoy a EFE el comisario del museo, Alessandro Cosma.
La pintura se podrá ver a partir de mañana y hasta el próximo 11 de julio, en el Palacio Barberini de la Galería Nacional de Arte Antiguo de Roma y no en el Palacio Corsini, su sede habitual, ahora en obras.
Además de la figura oculta, los diez meses de restauración de la obra alumbraron otros resultados, como la constatación de los pigmentos usados y de la técnica de Murillo o el descubrimiento de que el marco del cuadro no es el original.
Uno de ellos, el escritor francés Gustave Flaubert, se refirió a la “Virgen de Murillo” como una “alucinación perpetua”, probablemente por la naturalidad de la mujer dando de mamar al niño, escena idéntica a la primera vez que vio a Élisa Schlésinger, su musa real.
El historiador alemán Carl Justi habló de “una ventana de Andalucía en el Trastevere” para referirse al cuadro, con la figura de una “mujer con carácter popular” y no de una “Madonna” como las de la escuela italiana. De ahí, el nombre alternativo de la pintura: “La Virgen gitana”.