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La cantante londinense Dua Lipa conquistó el martes por la noche dos premios, entre ellos el codiciado “mejor álbum británico”, en la 41ª edición de los Brit Awards, que rindieron un emotivo homenaje al personal sanitario.
La ceremonia, que tuvo lugar en el estadio londinense O2 Arena en presencia de 4.000 personas sin mascarillas y con tests negativos al coronavirus -el primer gran evento musical con público en Reino Unido en toda la pandemia- estuvo totalmente dominada por las artistas femeninas.
Con su álbum “Future Nostalgia”, la británica, de 25 años, dejó atrás a la cantante soul Celeste, la autora-compositora y poetisa Arlo Parks así como al rapero J Hus, único hombre en liza en esta categoría mixta.
Dua Lipa, que ya había ganado tres Brit Awards en ediciones anteriores, también se llevó el premio a la mejor cantante, después de haber abierto la velada con un vestido con los colores de la bandera de Gran Bretaña, la Union Jack, y peinada al estilo de Amy Winehouse.
Tradicionalmente organizada en febrero, la ceremonia fue aplazada este año a mediados de mayo debido al tercer confinamiento decretado para luchar contra el coronavirus, que ha dejado más de 127.500 muertos en Reino Unido.
La mejora de la situación sanitaria ha convertido los Brit Awards en el primer evento musical británico con público y sin distancia social, en el marco de pruebas piloto realizadas por el gobierno para autorizar los eventos con público.
Los 4.000 participantes tuvieron que mostrar un test de covid-19 negativo a la entrada y tendrán que someterse a otro más después del evento. Entre los afortunados, unos 2.500 trabajadores esenciales de la capital británica, para los que los organizadores reservaron espacio en agradecimiento a su “compromiso desinteresado”.
Dua Lipa dedicó precisamente a una de ellos, la enfermera y profesora británica Elizabeth Anionwu, una de sus recompensas por su “brillante carrera de enfermera que pasó a combatir la injusticia racial” y a “defender con fuerza y convicción los trabajadores de primera línea”.
La reina de la velada invitó al público a “aplaudir con fuerza” a los trabajadores sanitarios, instando al primer ministro británico, Boris Jonhson, a que les conceda “un aumento decente” de salario ante el trabajo realizado durante todo el año pasado.
